Ya han sido dos meses y 21 días desde que por fin liberandome de toda atadura emocional, finalmente tuve el suficiente valor para entregarme a la soledad, terminar la relación que sostenía con S fue algo confuso, pero tenía que hacerlo, al poco tiempo de terminar intentamos mantener una relación de amistad, pero no fue posible, quise sostener el proyecto de programación pero como siempre con él no fue posible, a estas alturas miro hacia atrás y no logro entender porque decidí involucrarme en una relación sentimental con alguien tan extraño, siempre tan errante, todo tan confuso, senti todo el tiempo como si él fuera dos personas, una la persona con la que yo compartía y otra la que era cuando no estaba conmigo.
Nada ha sido fácil, hay días buenos en los que distrito estar solo, afortunadamente para mi hace tres semanas estoy en una nueva empresa, y añoro mantenerme en esta empresa indefinidamente, encontré nuevos amigos y estoy tratando de ser una persona menos misteriosa así que he abierto mi vida, estoy disfrutando los momentos, deje de buscar los trascendente y escondido mi personalidad de sabelotodo, fingiendo a veces no entender cosas, o dejándome llevar la mayoría de las veces por las conversaciones simples de la vida diaria, creo que ese es el secreto de la felicidad, dejar de preocuparse tanto y simplemente dejarse llevar y es lo que estoy intentando, desde que me quede solo me estoy esforzando por hacer las cosas de forma distinta, no se en que punto me quede tan solo, me perdí a mi mismo, hay días en los que trato de encontrarme para saber quien soy realmente.
Miles de emociones y sentimientos van y vienen en mi cabeza, pienso a veces tanto en T, creo que conocerlo a él definió el final de mi relación con S, cuando lo pienso me doy cuenta que es posible que en algún punto me enamore de él, a veces hablamos y quisiera poder expresarle todas esas cosas bonitas que siento por él pero no puedo hacerlo, de cualquier forma no soy correspondido y aparte las pocas veces que he intentado hablarle de mis sentimientos se distancia, en un silencio que solo puedo entender como su no correspondencia, él es de muy bonito corazón se que sería incapaz de hacerme sentir mal tal vez por eso se distancia evitando a lo mejor pensar que siendo honesto conmigo podría herirme.
Hace unos días lo encontré en Tinder, dice cosas tan bonitas, acerca de conectar con otros, es tan sensible y me pregunto por qué? Por que? No se fija en mi, que es lo que me faltó a mi para que él se enamorara de mi, por qué no ve que yo podría ser quien lo hiciera feliz, llore hasta quedarme dormido sintiéndome tan frustrado, me sentí muy triste porque cuando pienso en su sonrisa, cuando pienso en él solo puedo querer su felicidad, las veces que nos vemos el tiempo se detiene, el mundo se me hace pequeño y todo lo que el hace y dice es para mi el mundo, pero para él soy tal vez un amigo, alguien con quien ha pasado un momento u otro sin más importancia, soy alguien que conoce, alguien que tal vez él considere una buena persona, alguien con quien hablar tal vez, pero nada más y me devasta pensarlo, quisiera ser más para T pero ya no soy capaz de saltar y superar esa barrera que hay entre nosotros.
Y ahí estoy entre las sombras de vez en cuando preguntandole como esta, a veces hablamos un par de minutos y nada más, siempre soy el último que habla y luego me quedo solo, de regreso a las sombras, con los sentimientos por él guardados simplemente porque que más me queda? La verdad quiero dejar de sentir cosas por él, especialmente porque necesito esta soledad aunque la odie porque se que la necesito en verdad, necesito estar a solas conmigo, me pregunto en que momento termine odiandome tanto que me volví incapaz de estar conmigo mismo. Hundido en esta carrera entre una relación y otra, terminé haciéndome tanto daño, me siento perdido en muchas ocasiones preguntándome realmente quien soy, que me gusta, que quiero hacer.
He vuelto a hablar con DN, la verdad es que hace bastante tiempo habíamos conectado pero con todo el tema de mi relación con S, no fui muy amable con él en principio y dejamos de hablar, abrí Tinder al poco tiempo y conectamos de nuevo ya de eso casi un mes, hemos ido hablando es físicamente muy atractivo, tiene una personalidad particular pero me hace sentir chevere cuando hablamos y le gusta mucho el hecho de que yo sea espiritual y busque de Dios, aunque recientemente me siento más secular que otra cosa, es como si mi parte espiritual estuviera agonizando de nuevo, es bonita persona pero no quiero dejarme llevar porque detestaria pasar lo mismo que con T, además creo que me falta mucho tiempo de soledad hasta que deje de sentir necesidad de estar con alguien, hasta que disfrute tanto mi soledad que ya no quiera tener una relación y estoy seguro que en ese momento estaré preparado para construir algo, por ahora no puedo hacerlo.
No quiero sentir necesidad, y esta vez tengo claro que tengo que pasar por eso y sentir todo lo que tenga que sentir, llorar tanto como tenga que llorar, reír, reclamar, preguntar, evaluar, razonar, recordar y cuando todas estas emociones se resuelvan entonces ya no sentiré miedo a estar solo y estar con alguien será cuestión de decisión más que de necesidad, hasta el día en que recupere mi amor propio y aun así esperare lo necesario para que todas estas heridas por fin sanen.
Por ahora estoy aquí sentado, un sábado de tarde solo en casa, sintiéndome solo y aun así obligandome a no buscar a nadie, quiero pasar por eso y en serio lo quiero, he dejado de tener sexo casual, ya no lo disfruto y es un absurdo la verdad, he descubierto que estar buscando sexo casual es igual a tratar de callar esa voz dentro de uno que está diciendo que ando alga mal y hay que resolverlo y definitivamente no se resuelve con sexo.
Que será de mi, me pregunto, algún día encontraré a esa persona especial para mi? El mundo sigue y sigue y todo alrededor parece desmoronarse, no se que es ser adulto pero tendré que aprender porque muchas veces me siento como un niño asustado tratanto de vivir en este mundo lleno de locura.
Sigo viviendo con mi soledad, y espero poderme reconciliar con ella y aprender a disfrutar de su compañía.
Hay mucho que agradecer, y Dios es el autor de todas las cosas buenas que he recibido.