Hoy inicio un día con muchas incógnitas en mi cabeza, pero con la confianza plena que Dios está trabajando en nosotros y conoce nuestros corazones, Él es quien nos dará la luz y enderezará nuestros pasos y nos ayudará a tomar la mejor decisión para nuestras vida.
El miércoles en la noche, terminé con ese tristeza en mi corazón de verme aquí en estas cuatro paredes solo, pero más que el hecho de estar solo, era extrañar tu compañía, tu voz, tus palabras, tu presencia en este el que era tu hogar hasta hace unos días. Recibí un mensaje de DJ, un vecino que comenzó a hablar conmigo en instagram poco antes de nuestra separación, y si bien al principio parecía que él tenía algún interés romántico-sexual hacia mi, al conocernos la química fue de un buen amigo, y la verdad es que contigo en mi corazón y mi mente me es imposible sentir interés por otra persona. Pero ha sido un amigo en ocasiones cuando me sentí aburrido o triste, estando aquí solo en esta ciudad, y esa noche me escribió para que me asomara a la ventana, me saludó y se fue, no le presté mucha atención al tema; pero al rato me escribió diciéndome que si quería acompañarlo a comer en un lugar en el parque de la ciudad, no tenía deseos de salir, me sentía deprimido y no tenia animo de hablar, me hice el desentendido y volvió a insistir así que bueno me animé a salir, quería despejar mi mente, pensar en otra cosa, buscar una distracción a la tristeza que tenía.
Llegué, pedimos unos cócteles, estuvimos hablando tonterías de farándula y más tonterías pidió unos nachos y estuvimos hablando de nada importante, hasta que tocó el tema de líbido y su expectativa sentimental, me comentaba que ya no tenía casi libido que ya no tenía ganas de estar con nadie, que luego de su relación de 11 años se había vuelto corazón de piedra y ya no necesitaba estar con alguien, que era muy feliz solo, y que yo debería volverme igual, que me veía muy dependiente de alguien y yo debería volverme mas "nea". Genuinamente no tengo ningún interés sentimental o sexual hacia DJ, me cae bien y tiene de esas personalidades arrolladoras, pero si fue chocante darme cuenta que voy a encontrarme esa misma forma de pensar en las personas, mi sociedad solo quiere vivir para sí misma, una vida autocomplaciente, ególatra, en la que dar o sentir es un sinónimo de debilidad o de enfermedad mental, son conceptos que no logro comprender, que me chocan y que no puedo aceptar.
Me entretuve por un rato, pero el dejo de tristeza estuvo presente todo el tiempo, me sentía triste de parte de la vida que tenía, esa vida donde yo tenía un hogar, una familia y una vida estable. DJ me ofreció que luego me iba a invitar a los rumbeaderos de acá, y luego me iba a presentar personas para que yo volviera a "vivir", la amistad que me ofrece no dudo que sea sincera, pero no estoy seguro si quiero a mis 35 años volver a estar de fiesta cada fin de semana, andar bebiendo, bailando o viviendo una vida insulsa, superflua, enfocada en los placeres pasajeros. Volví a mi casa confundido, le pedía al Señor amigos, pero no es ese el tipo de amistades que quiero, estando al borde de la eternidad, no quiero perder el norte y sumirme en una vida absorta y disoluta, no quiero volver atrás.
Me fui a dormir extrañandote mucho, mi cama se sintió nuevamente enorme, finalmente caí cansado. Desperté temprano aunque con ganas de quedarme en la cama, pero tenía que organizarme para ir a la oficina, tenía comité de lideres, asi que no tenía opción, sin embargo estabas ahí en mente tan presente, ore nuevamente por ti, pidiendo al Señor que si eres para mi te transforme, despierte tu conciencia, y tu busques la ayuda que necesitas para sanar todas esas heridas que no te dejan ser feliz y que de paso me estaban haciendo daño a mi. Viaje en el carro hacia la oficina, y me fui hablando y pidiendo al Señor por ti, lloré una vez más sintiendo una rara combinación entre resignación y esperanza, sé que Dios nos escucha, nos ama, y de alguna manera todo esto tiene un propósito mayor.
Me costó mucho disimular mi tristeza, traté de fingir, de tener el buen ánimo, pero algunas de las chicas notaron que yo no me sentía tan feliz, llegada la tarde tenía planeado quedarme un rato más en Medellín, pero empecé a sentir la necesidad de llegar pronto a casa, tenía una sensación extraña y todo el camino de regreso estuve imaginando qué haría si te volviera a ver, cual debería ser mi reacción, todo el camino tuve esa sensación de que te iba a encontrar o te iba a ver, no sé era como si estuvieras cercano, y doblando la esquina de la calle que lleva a la puerta de entrada del parqueadero del edificio, allí te ví, sentado en el andén en plena noche fría, con tu carita, todo maltrecho por el viaje, te pregunte qué hacías acá y me dijiste que querías traerme algo y hablar conmigo, te confieso que me alegro verte, te extrañaba tanto, pero al tiempo sentí rabia, y confusión, porque justo comenzaba a resignarme a que ya no te iba a volver a ver.
Abrí la puerta del garaje, esperé en la puerta para que prendieras la moto, y la pudieras entrar al mismo lugar al que hace apenas 2 semanas era el lugar natural de parqueadero, y todo se sentía raro, parqueé el carro y al bajarme estabas tu ahí frente a mi, con un ramo de rosas Rojas , era la segunda vez que me dabas flores y me miraste con esa carita de tristeza, como si esperaras una mala reacción de mi parte, pero no pude, simplemente no pude, mi amor está intacto, y verte hizo que por un momento el dolor de tu ausencia se minimizara. Subimos al apto, viste como cambie de lugar las cosas, y nos sentamos a conversar aquí mismo en el cuarto donde tú hiciste todas esas cosas, y donde al fin todo terminó entre nosotros, no quise hablar, quería escuchar lo que tenías para decirme. Me contaste que iniciaste terapia, que te diste cuenta que me amabas como a nadie nunca en tu vida, que mi ausencia era muy dolorosa para ti, que te perdonara por haber callado tus sentimientos, por no haber sido capaz de expresar tus emociones y tu amor hacia mi, que te habías dado cuenta que tenias apego evitativo, y de alguna manera la ansiedad te había bloqueado, que te pesaba en el alma haberme perdido, porque no te veías con nadie más, que no era mi culpa lo que había pasado, que nunca habías visto las cosas como eran en realidad y que yo me merecía todo en esta vida y tu estabas dispuesto a hacer lo que fuera para hacerme feliz, para demostrarme tu amor, borrar todas tus redes de ser necesario, quitar contraseñas, limpiar completamente todo, me pediste que nos dieramos otra oportunidad, que sanaramos y nos casaramos inmediatamente, que yo era el amor de tu vida y no querías perderme, te arrodillaste, lloraste, me pediste perdón. Luego yo hable y te describí todo lo que yo creía que había sucedido, tu perversión y tu adicción a sostener esas conversaciones tan sucias, tu vocabulario soez y enfermo y sobretodo tu traición al hablar de mi de esa manera tan horrible cuando yo no lo merecía. Me explicaste que había sucedido como tu querías controlar a esas personas y te sentiste superior manipulando y rebajando a esos tipos, producto de tus inseguridades, tu ansiedad social, tu necesidad de agradar, y el hecho que me vieras como tu enemigo, porque llegaste a creer que lo que sentías era hastío de nuestra relación.
Me confesaste que en tu apego evitativo, temias tanto perderme que cuando quise terminar contigo te desconectaste para no sentir que el mundo se te venía abajo, y te volviste de hielo, y me hizo sentido porque así fue como sucedió, y simplemente tu ansiedad aumentó y fue cuesta abajo hasta llevarnos a lo que vivimos, nuestra triste separación. Yo me quebré y lloré, al describirte lo mucho que te amaba, lo que me dolía lo que habías hecho, lo que me dolía perder mi hogar y mi familia contigo, me sentía traicionado, y me dolía que el respeto, la confianza y mi dignidad hayan quedado por el suelo completamente, te arrodillaste me abrazaste y lloraste como núnca te había escuchado, y la verdad es que núnca te había visto tan vulnerable y tan sentimental como aquella noche, hablamos de la posibilidad de recuperar nuestro hogar, y te pedí que termines tu terapia es esperemos que luego de eso el amor si es verdadero entonces busquemos un terapeuta que nos ayude a ser funcionales, no quiero volver a vivir esto nunca más. Duele muchísimo.
Oramos juntos pidiendo perdón y la dirección de Dios, tu no habias comido nada, era muy tarde, estaba lloviendo y te pedí que te quedaras y te fueras temprano. Comimos, me contaste sobre tu hermana y mis gaticos, y no fui capaz de dejarte durmiendo en el sofá, soy mas fácil de la tabla del uno lo sé, pero yo quería volverme a sentir como antes, quería dormir contigo, tenerte al lado, por una noche sentir que nada sucedió, inevitablemente terminamos besándonos y haciendo el amor, extrañaba tanto tu piel, tus labios, tu cuerpo. Esa noche dormí como un bebé.
Al despertar yo me sentí extraño, incertidumbre y esperanza mezcladas, durante la noche tuve un sueño rarisimo donde yo volvía con D y luego te veía a ti, y echaba de nuevo a D de mi casa y te buscaba y terminabamos hablando y yo tratando de arreglar contigo las cosas, fue un sueño muy extraño. Pero bueno tu actitud si era diferente, mas romantico, mas tierno, mas amoroso, me hiciste el té que me hacias todas las mañanas, hicimos el amor de nuevo, y finalmente nos vestimos, te pedí que siguieras con tu terapia, que siguieramos orando, que yo iba a seguir así ausente mientras tu te sanas, para no intervenir en tu proceso. Tiene pico y placa hoy así que dejaste tu moto en el parqueadero para recogerla mañana, yo te llevé a la terminal, me besaste muchas veces, me recordaste que me amas y te fuiste.
Hoy no te he sacado de mi mente, lo mas difícil fue explicarle a mis papas y a los demás lo que ha pasado y mi cambio de mente, todos están "preocupados" y los entiendo, yo en mi rabia y mi dolor te pinté como un monstruo sociopata mentiroso, mi psicólogo no nos da mas de 20% de probabilidades de que todo realmente mejore, dice que tu comportamiento cultivado por tantos años te hace ser casi como un adicto a la droga o al alcohol, y además que yo estoy enceguecido por lo que siento por ti y estoy minimizando lo que pasó que fue muy muy grave. Me pidió 15 días para ver qué pasa contigo y con nosotros; y tengo miedo mi S, y si fracasamos, y si tus heridas y adicciones son mas fuerte que el amor y si no es amor lo que sientes? Yo te amo tal cual eres, pero no puedo hacerme daño toda mi vida, necesito que cambies de verdad, que nos conectemos como pareja, y en serio superes esas adicciones y nuestros problemas lo podamos resolver con sinceridad y transparencia.
Solo me queda orar al Señor, no sabes lo que anhelo recuperar nuestra vida, pero ya sanos y sin todos esos oscuros caminos que nos trajeron tanta desdicha y dolor, te amo muchisimo mi S, no fue sino hasta hace unas semanas que mi corazón finalmente despertó de su largo letargo y dejé de fijarme en tus defectos para amarte como eres, y fue ahí cuando la bomba explotó y todo dolió tanto. Tengo miedo que esto sea una ilusión pasajera, tengo miedo que todo eso lindo que me dijiste ayer sea un espejismo que se desvanezca cuando te sientas nuevamente seguro conmigo. Mañana vendrás a recoger la moto, en que actitud vas a estar, como serán las cosas? Le pido al Señor que nos guíe y nos ayude.
Te amo mi amor, incondicionalmente, me dueles mucho y sigo muy herido, pero guardo la esperanza que sanes y seas transformado. El Señor tenga misericordia de los dos. Te amo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario