Estoy aquí sentado, como soñando, como si no estuviera pasando, un vacío silente llena esta casa, como si la guerra hubiera terminado y el ruido de la lucha, la ansiedad, el conflicto de repente se hubiera callado. y estoy aquí solo, sentado en este vacío, en esta soledad, mi amiga. Abrazándome, viendo como mi corazón se cae a pedazos una vez más...
No pensé que las cosas terminaran de esta forma, tan abrupta, tan inmediata, después de aquel día que decidimos terminar yo me retracte al tercer día, el costo; pensaba en ese momento era muy alto, significaba perder mi hogar, la familia que habíamos construido juntos, nuestra vida cómoda, todo aquello que habíamos soñado botado a la basura. Y le pregunta si sentía que era lo correcto, yo supe con su respuesta que no estaba seguro de querer seguir conmigo pero me hice sordo y ciego, no quise entender y quise seguir luchando y luchando por un cadáver. Le propuse pagar terapeuta familiar, porque pensaba que nuestro problema era de comunicacion y aun tenia la esperanza de poder salvar nuestro hogar, y fui a la primera sesión con optimismo y salí de la sesión con esperanza. Sentía que las cosas estaban mejorando que S y yo podíamos aun salvar nuestra familia.
Y así nos fuimos a ese viaje en Punta Cana, tal vez el viaje más especial que he tenido en mi vida, y luché por conectarme con él, con nuestro amor, con lo que éramos, pero estaba distante ya, algo había cambiado, S era diferente. Pero yo no quise ver lo que realmente estaba pasando, me mentí a mi mismo, no quise ver la señales, trate de reconectarme con él pero ya no me miraba igual. Pensé que con el tiempo las cosas iban a mejorar, que llegando del viaje y buscando cambiar a una casa mejor, las cosas iban a sanarse y el amor iba a fortalecerse, y al llegar del viaje comenzamos a buscar casa, y los disfrutabamos, soñábamos con una casa hermosa, grande, llegamos a Colombia y los findes salíamos de viaje y pensé que todo iba a estar bien entre nosotros, pero no fue así.
En la última semana no me habia sentido bien, habia recaido de nuevo con los ataques de ansiedad y pánico especialmente en las noches, se sentía como si estuviera en una lucha espiritual, como si mi ser no pudiera encontrar paz, y volví a cuestionarme si toda esta ansiedad y estos ataques tenían que ver con S, no podía dormir a su lado, la última noche que pasamos juntos fue terrible para mi, 3 am despierto con ataques de pánico, sin poder conciliar el sueño, orando y pidiendo a Dios que me ayudara, que por favor me ayudara a sanar todo esto.
Y vino el día nefasto, miércoles 4 de octubre, curiosamente el día que FEMA hizo su famosa prueba de emergencias en EEUU y todos andaban histéricos dándoles diferentes significados al evento, como una premonición, una señal del cielo, mi evento canónico ocurrió de forma inesperada. Me desperté con la confianza de haber orado y la fe que Dios me iba a ayudar a sanar todo lo que me estaba produciendo esta enfermedad mental que no me dejaba ni dormir. Estaba de buen ánimo, S se levantó y me hizo el acostumbrado té de la mañana, se recostó conmigo un buen rato y luego como todos los días se levantó y me ofreció hacerme el desayuno, el domingo anterior habíamos ido a visitar una finca a Abejorral, y fuimos a conocer Sonsón, fuimos con mis papás y fue un viaje tan feliz para mi, veía a S y me sentía enamorado y feliz y agradecí a Dios por la vida que tenía, mi hogar, esa familia que habíamos construido, lo veía tan hermoso, sus ojos, esa carita; y vi nuestra vida nuevamente creciendo juntos como la pareja que habíamos sido los últimos 8 años. Y por estar en esa emotividad, quise subir nuestras últimas fotos al facebook que habíamos creado hacía años, donde yo guardaba nuestros recuerdos, pero no logré entrar, algo había pasado con la cuenta y creí que era la contraseña y creo que no hubiera sucedido como sucedió si me lo hubiera propuesto, pidiendo los códigos de recuperación de cuenta y tratando de reabrir ese perfil, terminé accidentalmente abriendo el facebook personal de él.
Yo y mi curiosidad, quise ingenuamente ver que tenía en el messenger del facebook, y entonces una cascada de mierda como si se hubiera abierto una compuerta de un pozo séptico, comienzo a leer la doble vida del que era mi pareja, del hombre que yo había querido y con el que soñaba construir un "Hogar", las cosas que leí con las muchas personas en facebook no las quiero ni recordar, las porquerías que les decía a otros tipos, y lo que más dolor me produjo fue leer como se expresaba de mi con los demás. Me llené de ira no me contuve, histérico le reclamaba por toda esa inmundicia, él no pudo reaccionar, y ahí fue donde ambos nos dimos cuenta que este era el final definitivo de esta historia. Durante años traté de comprender quién era S, la razón por la cual el siempre parecía estar desconectado en otro mundo, y viviendo juntos su "ludopatía" y mi frustración porque sentía que él le daba mas atención a los juegos que a nuestra relación, pero finalmente me di cuenta que no eran los juegos, eran los hombres, las personas con las que conectaba a través de los juegos y la forma en la que manipulaba las conversaciones para terminar hablando de sexo, y así era como satisfacía su deseo, razón por la cual siempre me quejé de su falta de ganas de estar conmigo. Ya nunca sabré si tuvo relaciones con otros tipos, si sus idas a medellín terminaban con faenas de sexo, el sexo que no quería tener conmigo, es una pregunta que ya nunca tendrá respuesta, y tampoco quiero saberla.
Su reacción fue como de quien se libera de una pesada carga, y en parte lo entiendo, mantener una doble vida no es fácil, es una piedra esclavizante que no te da paz en el corazón, karma tal vez, no puedo juzgarlo tan duramente ni pararme en un pedestal moral que no tengo. Durante meses anteriores yo intermitentemente coqueteaba con la idea de tener relaciones con otros hombres, y muchas veces también sostuve conversaciones asquerosas y envíe fotos, y hablé morbosidades, llegué a ponerme citas e incluso le fallé teniendo relaciones con 2 personas. Así que fue algo mutuo, ambos nos encargamos de destruir nuestra relación y nuestro hogar, las acciones de ambos terminaron por confluir en la hecatombe final que consumió por completo lo que quedaba de la relación que venía agonizando como a fuego lento los últimos meses.
Duele mucho, duele perder mi hogar y como me dolió despedirme de mis dos angelitos, esos dos gaticos que se habían convertido en mis hijitos, despedirme de ellos me rompió el corazón, terminó por destrozarme por dentro, su partida representaba el final definitivo de lo que yo soñaba era mi familia, el hogar que yo estaba construyendo. Empacó sus cosas, recogió todo lo que era de él. Y como entró a mi vida aquel abril de 2015 se fue...
Y aquí empieza mi evento canónico, comencé este registro con la ida de quien pensé había sido mi gran amor, y luego apareció en mi vida S, el protagonista de la historia casi 8 años, a pocos día de cumplir 8 años de relación. Esta vez no es como las otras veces, no hay esperanza, ni la certeza que va a cambiar y luego va a regresar. Se acabó, se terminó para siempre.
Tenía mucho miedo de quedarme solo, pero me aferro al Invisible, como siempre camino por fe, porque no sé qué me depara mañana, solo puedo creer que Él, mi amado Padre, que me mira desde el cielo y se toma tantas molestias conmigo para devolverme al camino, para hacerme caminar por la senda, por devolverme al redil. Me duele mucho, y voy a extrañar a S mucho tiempo, mientras escribo esto lloro, asi no hubiese querido que fuera nuestro final. Este es mi final de temporada, espero no repetir mas este ciclo de dolor, no saldré corriendo a buscar refugio en hombres, o desesperado tratar de encontrar el amor, el amor es un milagro de Dios en estos días, buscaré el amor en el abrazo de mi familia, en la sonrisa de mi sobrina, en las calles de los pueblos de mi tierra que supongo ahora recorreré solo.
Ahora que?
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